Carmen - Montilla

30-08-2014

En su casa de acogida alemana vive NEWTON, que se lleva muy bien con ella y le ayuda con los pequeños, haciendo de padre. Ahora, ella puede por fin tener algunos momentos de descanso, y recibir esos mimos que no había tenido.

Se completa así un ciclo aleccionador: la suma de fuerzas de todos, incluído Newton, ha sido un trabajo magnífico y gratificante.

Nos encanta Newton, debería ser un ejemplo para muchos "machos humanos".

 

 

Carmen - Montilla