Adopción de Kitty

KITTY apareció un día en la calle, probablemente abandonada pues se notaba que era demasiado sociable y desvalida. No estaba acostumbrada a la vida en la calle, por lo que estaba muy delgada.
Buscó cobijo debajo de los coches, y todos los días se acostumbró a esperar a una de las vecinas del barrio que le ponía un poco de pienso y agua debajo de una furgoneta.
Un día, Kitty no quiso comer y lo que hizo a continuación fue asombroso: siguió a la mujer que la alimentaba hasta su casa. La mujer al final no pudo dejarla en la calle y la subió en brazos hasta su piso, a pesar de tener ya en casa 2 perros y otros 2 gatos. Se la quedará hasta poder encontrarle un nuevo hogar, pues esta gatica no puede volver a la calle.
Kitty se adaptó enseguida a la casa y a los demás animalitos.
Es súper bonita, porque según cómo le de la luz, se le notan unas preciosas vetas de color dorado.
Pero por encima de todo, es una gata extremadamente cariñosa. Ronronea todo el rato, y sólo quiere mimos y caricias.
Necesitamos encontrarle un hogar definitivo, pues su casa de acogida tiene ya demasiados animales, y no puede quedarse con otro gatico.
Quién lo adopte, va estar encantado, porque de verdad que es la gata que todo el mundo sueña tener en su hogar: es muy amorosa y cariñosa.