Adopción de Huracán

Este es Huracán, uno de mis tres angelitos en adopción. A Huracán lo recogió el vete de mi pueblo, que iba andandito por la orilla del rio, con tan solo 2 meses; seguramente lo tirarían allí.

Y llegó a mis manos; y ha crecido conmigo, ha conocido las caricias (aunque escasas) conmigo, y ha cumplido su primer añito (el 1 de Noviembre) conmigo.....pero sinceramente, aunque me alegro enormemente de haber conocido y cuidado a este ser tan noble y maravilloso, ojalá hoy pudiera verlo en fotos que me mandaran desde el quinto pino su familia adoptiva!! Porque no conoce lo que es un hogar de verdad!!!! y yo tampoco se lo puedo mostrar. Allí en la huerta en casa de mi padre tienen cobijo, agua, comida...pero no sabe lo que es el calentorcito de una chimenea en navidad, una siesta en un sofá o una camita confortable (allí tienen casetas de plástico con paja), un despertar con su dueñ@ al lado que le diga cada mañana lo guapo que es y lo afortunad@ que se siente de tenerlo, una comida familiar (¡Con algún caprichito bajo la mesa!) ...todo eso es desconocido para él....

Huracán me transmite mucha alegría y energía cuando voy a verlos los findes, porque como nunca ha conocido un hogar de verdad, allí parece feliz, se conforma el pobre con poco. Se lleva bien con todo bicho viviente, correta como loco jugando con todos los perritos, y ¡Es un "huracán" incansable! En el paseo por el campo va siempre suelto porque es muy bueno y le gusta ir el primero. Ojalá alguien le dé una oportunidad; yo estoy segura que se enamoraría de él, igual que lo estoy yo, ¡Que me ha robado el corazón! a ver si recibe una familia de regalo por su cumple, aunque sea con un mes de retraso...le diré que se perdieron los de MRW!! jaja; que mejor su regalo se lo trae Papá Noel...

Huracán es súper sociable con todos los perros y gatos (como podréis observar en las fotos). Con los cachorros disfruta de lo lindo, pues él corre y todos los cachorros le persiguen y él se lo pasa pipa...¡pega unos saltos! Sería estupendo que lo adoptase alguien al que le guste salir a correr o pasear por el monte porque a este pequeño le chifla; es un perro muy activo. Se encuentra en perfecto estado de salud y con todas sus vacunas puestas. Ahora nos falta lo más importante, una familia adoptiva que le abra las puertas de su hogar.